Crear, imaginar, nada de esto está mal. Lo que está mal es crearse una realidad que no existe, lo que está mal es mentirse a uno mismo para sentirse vivo.A veces cuesta creer que me enamoré de alguien que no existió, que no existe ahora tampoco. Luché mucho tiempo porque exista, pero la realidad le gano a mi fantasía, a eso que aparento ser perfecto, o casi. Fuiste fruto de mi imaginación, de esa realidad que me invento cuando me gusta soñar, pero no se puede querer a quien no se conoce; fatal error haber creído conocerte, haberte querido, haberte creído. No sé que merezcas pero sé que no mi querer, no se si mucho o poco para ti, pero en la inversa sé que eres poco para él. Aunque igual te tengo que agradecer por las mentiras que me hicieron feliz, pero no te perdono las verdades que me pudieron matar en un final. Eres tanto, eres todo, tu no supiste querer, no supiste ver que te ofrecí mi vida, y hasta mi muerte si la quisieras, pero fui nada más un tiempo, yo enamorada y tu búrlandote de mi ingenuidad, de mi estupidez... Fui tu juego, y esta vez yo te digo game over. En esta vida todo se paga.Adios es lo que te digo, que a veces me gustaría creerme, y otras veces me acuerdo de que no existes, que eres aquel fruto de mi imaginación, tan perfecto pero también me acuerdo que la perfección no existe... solo en mi mente puede llegar a ser tan real, y a veces también me acuerdo que te invente para ser feliz, con vos, o mejor dicho con mi imaginación.